Río Grande, 13 de noviembre 2025.-Los agricultores del Valle del Río Grande han manifestado su preocupación ante el incumplimiento de México en la entrega de agua, pues a la fecha, han servido 812 mil acre-feet del millon, 750 mil 000 acre-feet del tratado vigente.
La International Boundary and Water Commission (IBWC) dio a conocer que el incumplimiento ha generado repercusiones directas en la agricultura de la región: los cultivos de cítricos, algodón y hortalizas dependen del agua de la Cuenca del Río Bravo para riego.
Con menos suministro, los productores alertan que podrían reducir siembras o enfrentar pérdidas millonarias.
Organizaciones agrarias del Valle han exigido a los gobiernos de Estados Unidos y México acciones inmediatas.
Algunos legisladores estatales están promoviendo mecanismos de compensación o recursos alternos para los regantes afectados.
Además, consultores del sector advierten que el problema de agua podría afectar la atracción de inversiones al Valle, ya que la infraestructura depende de un suministro confiable.
Asimismo, el costo ambiental es alto: la reducción del flujo hídrico impacta ecosistemas ribereños y la salinización de suelos agrícolas, lo que limita la productividad futura.
Un ingeniero agrónomo entrevistado explicó que sin agua suficiente, la transición hacia cultivos con menor uso de riego será difícil.
El conflicto también plantea tensiones diplomáticas: comunidades del Valle presionan al gobierno de Texas para que ejerza sanciones o retire beneficios comerciales a México, y varias voces locales señalan que el agua debe ser tratada no solo como recurso agrícola sino como derecho económico-regional.
