San Antonio, 15 de noviembre 2025.- La fiscalía de San Antonio identificó al presunto responsable del tiroteo ocurrido el pasado 8 de noviembre en un negocio de suministros para jardinería, donde tres empleados fueron asesinados. El sospechoso, José David Hernández-Galo, de 21 años, fue encontrado muerto horas después, por lo que la policía describe como una herida de bala autoinfligida.
El ataque ocurrió poco antes de las 8:00 a.m. en un establecimiento ubicado en la cuadra 4400 de Stahl Road. Las víctimas fueron identificadas como Selvin Chacón de 48 años, Sergio Chacón de 38, y Karen Bautista 24, todos empleados de la compañía.
Otros trabajadores lograron escapar sin resultar heridos, según reportó el Departamento de Policía de San Antonio.
De acuerdo con KSAT News, Hernández-Galo también trabajaba para la empresa. Testigos indicaron que llegó al lugar y abrió fuego contra sus compañeros. La policía implementó un operativo de búsqueda y, poco antes del mediodía, localizó su cuerpo a poca distancia del negocio.
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) confirmó posteriormente que Hernández-Galo se encontraba en Estados Unidos sin autorización legal. La agencia informó que ingresó al país en abril de 2019, siendo menor de edad, acompañado de familiares.
Registros del organismo señalan que la familia fue detenida por la Patrulla Fronteriza y posteriormente liberada con una orden de comparecencia ante un juez migratorio. Según ICE, desde 2022 no habían recibido actualizaciones de domicilio ni comparecencias relacionadas con su proceso.
Contexto migratorio de 2019
El año del ingreso de Hernández-Galo coincidió con un incremento notable en los cruces irregulares. En 2019, la Patrulla Fronteriza reportó más de 800 mil detenciones en la frontera sur, una cifra influenciada por decisiones judiciales que limitaron el tiempo máximo de detención de menores migrantes.
Una orden de la jueza federal Dolly Gee, emitida en 2015, interpretó que el acuerdo legal de 1997 sobre detención de menores también aplicaba a familias, estableciendo un máximo de 20 días de retención. Esto provocó la liberación de miles de personas mientras sus casos migratorios seguían pendientes.
Las investigaciones sobre el tiroteo permanecen abiertas mientras la policía reconstruye la secuencia completa de los hechos y analiza posibles motivos.
