Citi dio a conocer que la firma de Fernando Chico Pardo y su familia cerró un trato por el 25 % de la participación accionaria de Grupo Financiero Banamex. La operación ronda los 42 mil millones de pesos, una cifra impresionante, pero que, según los de la mesa, está dentro de lo razonable para el mercado mexicano.
Qué significa la jugada
Para Citi y Banamex, la llegada de Chico Pardo es una señal de confianza en el futuro del banco. La idea es reforzar las líneas de negocio, meterle velocidad a la transformación digital y, de paso, ampliar la cartera de clientes —tanto los que ya están— como los que podrían llegar. El acuerdo todavía necesita la luz verde de los reguladores y se espera que se concrete en la segunda mitad de 2026.
Reacciones de la casa matriz y del nuevo socio
“En Banamex estamos muy entusiasmados con la relación que se inicia entre Citi, Fernando Chico Pardo y Banamex. Fernando conjuga visión estratégica, excelencia operacional y un profundo compromiso con México”, comentó Manuel Romo, director general de la institución, en un comunicado.
Por su parte, Chico Pardo subrayó que su participación busca impulsar la digitalización y la atención al cliente:
“Estamos muy comprometidos y contentos de formar parte de Banamex, una institución icónica en México con un futuro muy prometedor. Creemos que la vocación histórica de Banamex es apoyar al país y a su gente, y eso se conjuga con nuestra firme convicción de que invertir en México es la mejor opción”.
Citi volvió a enfatizar que la desinversión de Banamex sigue siendo una prioridad estratégica. El proceso de oferta pública inicial está todavía en fase de análisis y dependerá de cómo se muevan los factores de mercado y las decisiones regulatorias. En resumidas cuentas, la jugada —abre la puerta— a una nueva etapa para Banamex, con la esperanza de que la combinación de recursos y visión de los tres actores le dé un empujón de esos que hacen la diferencia.
